330 kilometros de carretera recorrida me llevaron justo donde Dios se quitó el sombrero y descansó, les hablo de Pedernales. Tierra de impresionante belleza natural, ricos recursos virgenes y una peculiaridad en cuanto al clima inigualable: puedes estar muy caluroso en un lado y muy frío a escasos kilimetros dentro de la misma provincia.
USAID/DSTA se unieron nueva vez para presentarnos a Pedernales a través de su Cluster turístico, un grupo de valientes hombres y mujeres que buscan resaltar tantos recursos naturales y humanos con los que cuenta su pedazo de tierra.
Conocer sus principales atractivos fue una experiencia de ensueño, la playa de cabo rojo, bahía de las aguilas que sin lugar a dudas no tiene comparación, es bella y punto, el hoyo de pelempito una depresión natural con un microclima por debajo de los 15 grados centígrados que fuertemente contrasta con los 37 grados de sus alrededores.
La calidad humana, su tranquilidad, la hospitalidad a la que te sometes en sus bellos y cómodos hoteles, la seguridad brindada por las autoridades locales son merecedoras de premios a la excelencia.
Si no conoces Pedernales, date la vuelta, es un lugar que no debes dejar de conocer porque yo creía que habia visto bellezas hasta llegar a Pedernales.
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